POR ATZAYAELH TORRES
Aunque el panorama no es prometedor, la economía mundial ofrece oportunidades para que de forma más rápida se pueda alcanzar la recuperación global.
Paul Krugman, premio Nobel de economía 2008, aseguró que actualmente se está viviendo un “extraordinario” episodio de la historia mundial debido a que la recesión que se respira todavía en los negocios genera en las economías del mundo más creatividad con la que quieren combatir el rezago.
Las economías emergentes, en opinión del experto y columnista del New York Times, las empresas deben buscar refugio en las economías de países emergentes, donde estaría “la mayor parte de la esperanza de esa recuperación”, dijo.
A modo de broma sugirió que se encuentre un planeta al que se deba exportarle para salir del problema, ya que en las crisis que se sufrieron en México durante 1995, Corea en 1998 y Argentina en 2002, la problemática pudo ser revertida con un incremento en la actividad exportadora, “el problema es que ahora no existe lugar que compre esas exportaciones”.
“En crisis anteriores, Sudamérica ha sido la región más golpeada en las crisis, pero en esta ocasión no ha sido así… esta región es una oportunidad para que mundo se recupere y hasta cierto punto contamos con el sur que se convierta en una locomotora ara el norte pero representa algunos problemas”, dijo en ante un auditorio lleno.
En el marco de la ExpoManagement 2010, señaló que hasta el momento en el mundo no se han provisto de políticas fiscales especiales para poder combatir la recesión, ya que pese a los cuantiosos estímulos anunciados por varios países, no ha sido suficiente.
Sobre México, comentó que no embona bien en los mercados emergentes debido a que su actividad está directamente relacionada al comportamiento de Estados Unidos, “lo cual no es del todo malo porque en momentos positivos se ve beneficiada pero ahora que está la crisis no puede disociarse de sus problemas financieros con tanta facilidad”.
Comentó que las medidas recientes tomadas por la Reserva Federal (FED) de Estados Unidos sólo tendrán un efecto mínimo y por ende no cambiará la situación que predomina en la economía.
“Gran parte del mundo teme mucho que esto sea altamente inflacionario, es poco probable, el mercado está preocupado de que Estados Unidos disminuya el valor del dólar y exporte sus problemas, eso es poco probable de verdad”, señaló.